Un vestido negro no entiende ni de tendencias ni estaciones. Es clásico, imprescindible y jamás te abandonará. Pero sus ventajas también nos recuerdan que al otro lado del cuadrilátero se encuentra el modelo favorito de Valentino, Jessica Rabbit, Letizia o Julia Roberts en Pretty Woman. El vestido rojo no es tan ponible como el primero, pero su magia es de otra índole (a veces inexplicable) y este modelo de H&M es la prueba.
© Cortesía de H&M
Tal vez sus mangas ligeremente abullonadas, su largo midi y ese corte entre recto y oversize que promete sentar bien al 90% de las mujeres fueron los detalles que nos hicieron caer rendidas ante los encantos de este vestidazo. Pero observado con detenimiento se infiere que además comparte todas de las virtudes de un Little Black Dress (pequeño vestido negro): es versátil, funcional, camaleónico y ajeno a las tendencias en el mejor de los sentidos.
© Cortesía de H&M
Para nosotras, el vestido MÁS bonito que hemos visto en lo que va del mes. Y eso que las propuestas estilísticas de cara a las fiestas solo acaban de arrancar.
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